Sin dudarlo, estoy viviendo unos de los momentos más emocionantes de mi vida, un intenso viaje por el continente asiático. Mi primera parada  ha sido en Hong Kong.

Apenas un día con su noche que me bastó para saber que tengo que volver, con más tiempo y las mismas ganas. No puedo decir que lo que he visto de Hong Kong sea bonito, pero emocionante y sorprendente, un rato. De primeras me chocó muchísimo lo estropeada que está la ciudad, rascacielos de lujo se funden con casas que en España no obtendría la célula de habitabilidad ni por asomo. Desde mi punto de vista Hong Kong es una treintañera mal conservada, a la que la polución le ha jugado una mala pasada.

Me alojé en el hotel Ovolo (West Kowloon), que os recomiendo totalmente, con unas vistas impresionantes de la ciudad (estuve en una planta alta y desde allí arriba se podía apreciar lo que os comento), limpio, con gimnasio y con un precio razonable. Si os interesa podéis contactar con el hotel AQUÍ

En los alrededores del hotel, situado en West Kowloon, se celebra un mercadillo en las calles, objetos de segunda mano desde televisiones hasta gafas de sol y lo mejor, puestos donde puedes comprar piezas preciosas de jade.

Las calles de esta zona están llenas de rótulos luminosos que parecen pelear por ver cuál de ellos llega más alto. Respecto a los olores, buff lo pasé un poco mal, sobre todo al pasar por ciertos puestos de comida con pescados, gambas, pulpos y demás animalitos marinos secados y listos para consumir, sí, listos para consumir porque las preferencias alimentarias en China son muy diferentes a las europeas.

Respecto a la comida, no tiene nada que ver la con la comida china que comemos en España. Cosas que tienes que tener en cuenta si vienes aquí:

-Si pides pollo, pídelo sin piel porque aquí lo cocinan y se lo comen con la piel.

-Si pides agua especifica que sea fría porque beben en las comidas agua muy muy caliente.

Personalmente te recomiendo comer en los puestos de la calle, ves como se hace la comida y no tienen nada que envidiar a los restaurantes (me refiero a los normales, asequibles, si quieres gastar más, mucho más la cosa cambia) y además son mucho más económicos.

Aunque fueron pocos días no perdí la oportunidad de hacer un poco de shopping, bueno más bien a visualizar lo que podía comprar, porque soñar es gratis ¿verdad? Y el escenario de mi sueño fue el C.C. Harbour City. Missoni, Prada, Chloé, Louboutin, Louis Vuitton… en Mallorca no hay tanta variedad de tiendas de lujo o alta gama, así que os podéis imaginar lo que disfruté paseando y probándome todas las piezas que se me antojaban. Fue como estar metida entre la páginas de VOGUE.

Para continuar el shopping te recomiendo Soy street (Mong Kok, Kowloon) con una variedad infinita de establecimientos y donde me chocó mucho el que estuvieras parada frente a un escaparate y vinieran a ofrecerte el clon del artículo que estabas mirando…

Y hasta aquí mi pequeña guía turística de Hong Kong, no hubo tiempo de más pero prometo ampliarla con muchos más detalles, porque pienso volver.

Estoy trabajando mucho y con poco tiempo para todo lo demás, porque este viaje es por motivos de trabajo, investigando para crear mi nueva firma de ropa como os comenté , pero tal y como me habéis pedido alguna de vosotras, aunque sea de forma breve os iré contando mi paso por otras ciudades asiáticas en China, otras como Jakarta y desde os escribo ahora mismo, Bangkok, que me tiene totalmente enamorada, hasta tal punto que el año que viene me gustaría pasar una temporada aquí.

¡Un besazo desde Tailandia!