
En un mundo en constante movimiento, hacer una pausa consciente se convierte en algo muy necesario. La semana pasada, tuve el privilegio de asistir a un evento organizado por Hammam Al Ándalus en Palma, pensado para reconectar con nuestros sentidos, especialmente el olfato, y disfrutar de un momento de bienestar integral. Recién llegaba de Madrid y había dormido poco, pero me levanté de un salto pensando en la experiencia que me esperaba esa mañana.
El encuentro reunió a un grupo de empresarias y mujeres profesionales de Mallorca en Cappuccino Grand Café, un entorno acogedor y elegante que fue el punto de partida para una mañana inolvidable. Allí, entre conversaciones y sonrisas, compartimos un delicioso brunch que sirvió como antesala perfecta para sumergirnos en el universo sensorial de El Jardín de Hammam, la línea cosmética natural de Hammam Al Ándalus.
Guiadas por expertas en aromaterapia, tuvimos la oportunidad de conocer y experimentar las nuevas brumas botánicas, diseñadas para acompañar nuestros rituales diarios y ayudarnos a conectar con diferentes estados emocionales: calma, energía, claridad o equilibrio. A través de este taller sensorial, comprendimos el poder del olfato como herramienta de transformación emocional, de presencia y bienestar. No fue solo una presentación de producto, sino una invitación a parar, respirar y reconectar desde algo tan sutil como un aroma.
Tras este recorrido olfativo, nos dirigimos al Hammam Al Ándalus Palma, un espacio mágico inspirado en los antiguos baños árabes, donde la piedra caliente, el agua y el silencio invitan al descanso profundo. Pudimos visitar sus instalaciones (no es mi primera, ni mi segunda vez, este lugar ya es casa para mí) y conocer de cerca la filosofía que sustenta su propuesta: una experiencia de bienestar global que trasciende lo físico para alcanzar también lo emocional y lo espiritual.
El broche final fue un tratamiento Midra, que es mi favorito y el que os recomiendo si queréis disfrutar de vuestra experiencia Hammam Al Andalus. Este masaje combina el arte del tacto con el poder del agua y el ritmo pausado, creando una experiencia que, literalmente, me reinició por dentro. Salí renovada, más ligera y, sobre todo, profundamente agradecida.
He colaborado con Hammam Al Ándalus en varias ocasiones, y siempre consiguen sorprenderme con su forma de entender el bienestar como un camino hacia el equilibrio interior. Este evento fue un regalo, una pausa en medio del ajetreo, y una oportunidad de compartir entre mujeres conscientes que apuestan por cuidarse, inspirarse y vivir con intención.
Con Meredyn White, asistente al evento
Ha sido un honor formar parte de esta experiencia. Gracias, Hammam Al Ándalus, por recordarnos que el bienestar comienza por respirar.