La semana pasada tuve la suerte de acudir a la presentación del nuevo menú desgustación del restaurante Es Fum, un restaurante ubicado en el hotel ST Regis Mardavall en Calvià. Es Fum cuenta con una estrella Michelin y su chef, Rafael Sánchez nos presentó en persona una serie de platos que me no me pudieron gustar y sorprender más. Rafael Sánchez destaca por conocer la materia prima, su creatividad y su técnica dan como resultado platos ricos y ligeros, con aromas que te dejan adivinar el sabor que vas a encontrar en cuanto tienes el plato en la mesa, aunque a veces, como os voy a explicar después, no es posible y sus creaciones te dejan con la boca abierta…
En primer ligar deciros que acudir al hotel para visitar el restaurante es ya toda una experiencia, nada más pasar por sus puertas pasé a modo vacaciones, me relajé, tomé aire y me dejé cuidar por su magnífico equipo, que mima todo al detalle.
Last week I was at the presentation of the new menu of Es Fum restaurant, in the hotel ST Regis Mardavall. This restaurant has a Michelin star and we could know his chef, Rafael Sánchez.
Empezamos tomando una copa de cava mientras llegaban todos los invitados, entre ellos, tuve la suerte de conocer a Pernilla de Lifestyle Mallorca, no podéis perderos la forma en la que ve la isla desde su Instagram. Después pasamos a la impresionante terraza donde tomamos unos aperitivos, pudimos saludar al chef Rafael Sánchez para poco después, pasar al restaurante.
Como entrantes del menú degustación, empecé con Coca de erizo, algo así como una neula llena de sabor con una textura sorprendente, Hummus de trampó y Manzana oro, un deliciosos licuado de manzana grammy smith con polvo de oro que tenía un sabor ácido y fresco. El último aperitivo fue muy gracioso porque ni los que estaban en mi mesa ni yo, nos dimos cuenta que las piedras de decoración, no eran piedras de decoración, sino unas deliciosas Piedras de Mahonés, que para que me entendáis era algo así como un bombón helado con cobertura de cacao y sabor a mahonés que con el jugo de manzana era una delicia para el paladar. Para acompañar los entrantes el cava Leopardi Gran Reserva Brut Nature 2009 de bodegas Llompart.
A continuación la que yo he nombrado la mejor ensalada del mundo… Hojas frescas de primavera, puré de frutos rojos y aromas ahumados. Me encanta el sabor ahumado y la mezcla de este plato me fascinó, muy bien acompañado por un vino blanco suave y afrutado que em apunto para otras ocasiones, Ribas Blanc 2015 de Bodegas Ribas.
Es cierto que el foei es un plato arriesgado, porque no todo el mundo acepta su textura y sabor, pero a mí, me gusta y me gusta muchísimo, así que disfruté con el Taco de foei parrilla, leche de cabra y kaffir, compota y tierra de nísperos. Un plato nada pesado a pesar de su principal ingrediente, el foei y los toques ácidos del níspero se llevan de maravilla, al igual que con el vino que fue servido, un Jerez-Manzanilla, Excepcional Harvest 2014, Ximénez-Spínola.
Llegue al plato principal como una niña pequeña esperando el postre -que con el postre también como una niña pequeña jaja- leí la palabra coco en la carta y ya estaba entusiasmada y no me defraudó, el Filete de Cap Roig, fideuá cremosa de coco citronella, clara y remolacha con habitas del tiempo creo que no necesita presentación tras su nombre. Un plato de sabor delicado pero lleno de sabor a mar, el toque de la remolacha me gustó muchísimo, así como la cocción justa del pescado, esta jugoso, el vino que le acompañaba, Morlanda Blanc 2014, Celler Morlanda, D.O.Q. Priorat.
Y llegó el postre, de los mejores que he probado, me gustó la idea de representar la trufa en el campo, con chocolate simulando la tierra, setas combinadas con dulce… una locura el Tartufo blanco y negro, un postre de 11. Se sirvió con Pansal del Calás 2010, Celler Capçanes.
Y cuando pensábamos que las delicias habían terminado, nos sirvieron unos deliciosos bombones con el café. La sobremesa fue estupenda conociendo a gente nueva y pudimos dar la enhorabuena al chef.
Sin dudarlo el nuevo menú degustación del restaurante Es Fum es para tenerlo en cuenta si lo que quieres es probar algo realmente especial, que te sorprenda y recuerdes como una experiencia única.
Terminamos la comida tomando un té en la terraza con conversaciones más que interesantes, un día perfecto donde además de comer rico, conocí a personas extraordinarias.
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