Nuestra piel es importante no sólo a nivel estético, una piel bonita refleja una buena salud y una piel saludable nos protege de las agresiones del exterior.
Si todavía no tienes una rutina de belleza indicada para tu piel, no esperes más porque usar productos de forma personalizada es el primer paso para tener una piel envidiable. Se habla mucho de si usar leche limpiadora o aceite, incluso de la doble limpieza, de las cremas que son mejor para cada tipo de piel, del contorno de ojos y del tónico para regular el ph, aunque este paso no todos los profesionales lo consideran imprescindible, pero poco se habla de un producto muy importante, el exfoliante.
Son muchas las marcas que ofrecen exfoliantes de una alta calidad, también se puede confiar en una fábrica de cosmética a terceros para obtener un buen producto porque ¿quién no ha soñado alguna vez con una firma de cosmética propia?
En este artículo os voy a explicar para qué sirve, porqué es tan importante y cómo se aplica.
¿Qué es y para qué sirve el exfoliante?
El exfoliante es un producto de cosmética que sirve principalmente para eliminar las células muertas de nuestra piel y también la suciedad. Es además un producto que te ayuda a tener los poros limpios y esto evitará inflamaciones, granitos internos y puntos negros. Tras usar exfoliante, la piel luce más tersa, limpia y con un aspecto vital. Por ese motivo, no te olvides de este producto en tu rutina de belleza y elige uno que sea acorde a las necesidades de tu piel.
Si tienes la piel sensible, apuesta por ingredientes naturales como puede ser la avena, la sal o el hueso de melocotón. También existen exfoliantes donde las micropartículas están hechas con productos químicos, estos suelen ser más agresivos (y más efectivos) con la piel y te recomiendo que los uses siempre bajo supervisión o recomendación de un profesional. En ambos casos, lo más recomendable es hacer una pequeña prueba de tolerancia al producto en una pequeña zona de la piel, antes de usarlo en todo el rostro.
En todo caso, apuesta por un laboratorio de cosméticos de calidad, usar buenos productos es clave para obtener buenos resultados.
Usar exfoliante no sólo te sirve para eliminar impurezas y limpiar en profundidad tu piel, también te ayudará a que esté más oxigenada, se regenerará teniendo un aspecto más joven, previene los signos de envejecimiento prematuro, activa la circulación sanguínea y te ayudará a que tu el tono de tu piel se vea más unificado.
¿Cómo usar el exfoliante?
Cada producto tiene sus indicaciones, te recomiendo seguirlas, aunque lo habitual suele ser exfoliar la piel una o dos veces por semana. Si tu piel es sensible, seguramente tengas que bajas a una vez por semana y si tu piel es muy grasa o sufres de acné, quizás tengas que subir a tres veces a la semana para asegurar una buena limpieza de tu piel.
También se recomienda usar el exfoliante con la piel húmeda, a fin de que las partículas se puedan mover con facilidad y sin arañar la piel. Con una pequeña cantidad del tamaño de una avellana, puedes exfoliar cara y escote, mediante suaves movimientos en forma de círculo. Es importante aclarar con agua abundante para retirar los restos de exfoliante y usa tu crema hidratante habitual después.
Aunque en este artículo os he hablado del exfoliante facial en concreto, cada zona de tu cuerpo necesitará un exfoliante diferente y usando el indicado, notarás los beneficios en labios, codos o pies, por ejemplo.
Ahora que sabes todo lo que este producto puede hacer por tu piel, estoy segura de que te saltarás este paso en tu rutina de belleza y ten por seguro que tu piel te lo agradecerá.