No suelo tomar café fuera de casa a no ser que sepa que en el sitio en concreto, sirven leche de avena, no me arriesgo a pedirlo, así como panela o sirope de ágave para endulzar y que el camarero me mire como a un marciano.
Que llevemos toda la vida alimentándonos mal, no quiere decir que lo tengamos que seguir haciendo y estaría genial que en muchos sitios se pusieran las pilas ¿no creéis? Y estaría todavía más genial que a los que tratamos de comer de forma saludable, no nos trataran como a locos. locuras hemos estado haciendo durante años.
Y lo de quedar para tomar algo, pues al final, acabo pagando dos euros (o más) por una botella de agua, por no pedir gas o zumos con extra de azúcar que no quiero para nada…
Miento, a veces me pido una copa de vino… pero a según que horas y según lo larga que sea la charla o la reunión, no se puede repetir, así que en la segunda ronda, el mismo dilema ¿qué pido?
Cuando Native Organics me presentó su producto, pegué un bote de alegría. Por fin una bebida sana y ecológica, un refresco totalmente natural con el que hidratarse y disfrutar, con mucha menos azúcar que un agua con sabor, sin edulcorantes artificiales ni azúcar refinado.
Además, su envase, en lata de aluminio, es 100% reciclable ¡libre de plásticos!
Este refresco isotónico, existe en varios sabores, coco, limón y naranja, mi preferido, al que añado un poco de romero y me lo tomo como si fuera un cóctel. No sabéis lo bien que sienta bien fresquito para acompañar la puesta de sol.
Os animo a probar y espero que pronto podamos pedirlo y comprarlo en muchos sitios.
♥ Native Organics
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