Hace un par de años os hablé de la pasta italiana artesana Makaría. La pasta artesana es mucho más digestiva y ligera que la pasta que venden empaquetada, utilizan un tipo de sémola especial que la hace más sabrosa y adquiere el doble de sabor al mezclarla con otros ingredientes, precisamente en estas mezclas es en lo que destaca Makaría, sus combinaciones de sabores no pueden estar más ricas. Su nuevo local en la calle Jordi Villango Velasco, 5 (Palma) tiene múltiples funciones, es la fábrica, puedes comer en el precioso local, comprar pasta para llevar o sus productos gourmet para acompañarla.

Cada mediodía los platos van cambiando y ofrecen varias alternativas. Sus ensaladas de quinoa están deliciosas y respecto a su pasta, no hay combinación que haya probado y no me haya gustado. En esta ocasión probé sus raviolis con tinta de calamar rellenos de calamar, patata y pimentón de la Vera, tal como suena sabe ¡se salen!

También probé raviolis de remolacha relleno de castañas frescas, ricotta y esencia de naranja, muy diferentes a todas las pastas que había probado hasta ahora. Para terminar, un panettone artesanal con crema mascarpone que tendría que ser obligatorio comerse uno cada día para ser feliz.

Conozco a Paolo y Massimo -responsables de Makaría– desde hace mucho tiempo y me emociona ver lo rápido que han crecido, cosa que no es de extrañar porque le ponen mucho cariño y se nota. El que la sigue, la consigue ¡Enhorabuena chicos!

Si tienes oportunidad, pásate por su nuevo local, estoy segura de que se convertirá en uno de tus sitios preferidos para comer rico un mediodía.