Cada vez que visito Barcelona (y ahora caigo en la cuenta de que hace mucho) los restaurantes del grupo Tragaluz son visita obligada… ¡me encantan! Por eso, cuando su socio comercial-fundador entre otros, abrió el primer restaurante de En Compañía de Lobos en Mallorca, Spot, se fue directo a mi wish list gastronómica. Hace unos días, probé por fin su cocina, que superó con creces mis expectativas, Spot no podría estar mejor ubicado, en el barrio de moda en Palma, Santa Catalina (Plaça Verge del Miracle, 3)

Un espacio abierto y acogedor que invita a relajarse y a relacionarse con todo el que está en el local. Su carta es variada, fiel al estilo de la compañía. Como entrantes, probé su ensalada japo, que os recomiendo si os gustan las algas, algo picante y con una mezcla de texturas muy top y sus tortitas de sashimi con aguacate, ligeras, crujientes y tan buenas que te comerías decenas jajaja

Después de ver el horno de la entrada, tuve claro que quería probar una de sus pizzas. Me dejé aconsejar y no fallaron recomendándome la pizza de calabaza y queso de cabra ¡un espectáculo! Además del sabor y de la mezcla de sabores, me sorprendió que la masa era color negro, pensé que sería de centeno pero no, el color era debido a que llevaba carbón oxigenado que favorece la digestión. Además, en Restaurante Spot dejan en reposo la pasta de sus pizzas 72 horas, lo que hace que se consiga una textura ligera (y muy rica también) Uno de sus platos estrella es el Chow Mein, unos fideos chinos salteados con verduras y pollo a los que no le hice ni la foto, olían tan bien que nos duraron nada y menos en el plato.

No soy mucho de postres, pero justo me encontré allí a una amiga y me dijo que tenía que probar su sandwich de coca de patata de Valldemossa con helado, hice bien en pedirlo porque me encantó.

Además de estos platos, en su carta encuentras otros como Pato crujiente al estilo Pekín, Bacalao negro con agridulce de berenjenas, una gran variedad de pastas y ensaladas y muchas opciones para picar. Entre semana ofrecen además, un menú de mediodía por menos de 15€, de hecho, me gustó tanto que volví hace unos días para probarlo y pienso repetir. Los batidos y cocktails me quedan pendientes para otras visitas porque tienen muy buena pinta.

En resumen un sitio que mezcla lo de allí con lo de aquí, vasijas de Pollença, suelos ibicencos y alfombras con parte del suelo de una Iglesia mallorquina combinan con una cuidada decoración escandinava, el resultado, un espacio tan acogedor que hace que te relajes y disfrutes del magnífico momento de compartir mesa con buena compañía. Y siendo pet friendly y saber que puedo llevar conmigo a Allegra, ya me han conquistado del todo.

#spotpalma