Si hay algo que aporte personalidad a la mirada y la enmarque como ninguna otra son las cejas, una parte de nuestro rostro que debemos cuidar para ganar expresividad y resaltar la belleza de nuestros ojos.

Con el paso del tiempo o quizás por una mala práctica al depilarlas demasiado, las cejas van perdiendo pelo y por consecuencia, su forma. Afortunadamente el mundo de la belleza evoluciona y hoy en día existe un tratamiento que nos permite recuperar e incluso esculpir nuestras cejas de una forma natural e inapreciable.

En mi caso, llevaba mucho tiempo pensando en ello, pero he de reconocer que todo lo que tenga que ver con el rostro, me da respeto y temía no obtener los resultados deseados. Me lo seguí pensando hasta que conocí a Ana Román en mi visita a Carlos Martín Peluqueros y me explicó su forma de trabajar para realizar el microblading.

En primer lugar el Instagram de Ana Román es ya una buena carta de presentación, donde puedes ver su trabajo, cuidado y sobre todo natural, en diferentes mujeres con diferentes estilos y cada ceja tratada de forma personalizada.

Ana valora en una primera entrevista lo que puede hacer por ti, en la segunda visita si sigues adelante con el microblading, te hace un diseño de ceja. En mi caso, tengo varias zonas donde he perdido pelo (heridas, nervios…) y quería darles una forma más marcada, volver a la forma de mi ceja natural y «arreglar» esos fallos al depilar que dejan las cejas desiguales.

En esa primera visita ya se «tatúa» la ceja, un tatuaje temporal que dura aproximadamente un año, según la piel

de la persona. No hace trazos muy marcados, ni cejas muy tupidas, para que te vayas acostumbrando y decidas en el plazo de unas semanas si las quieres más marcadas o quieres seguir en esa línea de naturalidad.

¿Duele? no duele en absoluto ya que utiliza anestesia localizada durante todo el procedimiento, en mi caso me duele más depilarlas con pinzas. Eso no quita que se rasga la piel y que tras el tratamiento debes cuidar tus cejas como herida que son, protegiéndolas con vaselina para evitar infecciones. Tras el tratamiento pocas normas, no realizar ejercicio ni esfuerzos al día siguiente, ni mojar la zona en las siguientes horas.

En mi caso, volví una segunda vez para marcarlas algo más, a mí me gustan más pronunciadas. A tener en cuenta que también existen varias tonalidades, para adaptar el color de la ceja a el color de tu pelo y que no se note en absoluto la diferencia. En algunos casos, requiere alguna sesión más, hay que tener en cuenta que depende de la piel y el estado de la ceja.

Es imposible averiguar cuál es mi pelo y cuál es el pelo dibujado por Ana.

Estoy encantada, es de las mejores cosas que he podido hacer para resaltar mi rostro y aunque yo soy de las que se maquillan las cejas, es maravilloso poder saltarse es paso y levantarse ya con una mirada bonita, así como poder lucirlas en los días de piscina/playa.

Además de microblading, Ana Román realiza tratamientos faciales y extensiones y lifting de pestañas.

¿Dónde está la cabina de Ana Román?

En el interior de Carlos Martín Peluqueros, en Costa de sa Pols, 5 (Palma)

Puedes reservar tu cita en el 644748844